lunes, 30 de enero de 2012

El César Vallejo que no conoció Julio Ortega




“El César Vallejo que yo no conocí” [Vapor transatlántico: nuevos acercamientos a la poesía hispánica y norteamericana contemporánea (Fondo Editorial de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos/ Fondo de Cultura Económica y Hofstra University, 2008) 39-45] es una breve comunicación que glosa el conocido testimonio de Ciro Alegría, “El César Vallejo que yo conocí”. Contra esta última presunción de legibilidad, Julio Ortega se refiere más bien a aquella opaca que alcanzó a percibir: “tras las versiones de quienes compartieron con él algunos tramos del camino”; y estos testigos principales, entre tantos otros personajes colaterales de su relato, son los tres siguientes: Alejo Carpentier, Juan Larrea y Georgette de Vallejo.

El primero de ellos, Carpentier --“uno de los amigos más cercanos de Vallejo en París”-- sorprende a Ortega ya que en modo alguno satisface su curiosidad por una posible participación o repercusión --en el peruano-- del rompimiento del antillano, junto a Robert Desnos, con el líder del surrealismo, André Breton. Ninguna anécdota al respecto de parte de Alejo Carpentier. Sin embargo, Julio Ortega enfatiza que ambos escritores, el autor de El reino de este mundo y el autor de Trilce, tenían algo fundamental en común: “su compleja relación con el momento literario europeo”. Es decir, cada uno buscaba a su modo una respuesta cultural propia de América Latina; al surrealismo y al existencialismo --por vía de la antropología o etnología--, Carpentier; a la política, o la del intelectual al servicio de la clase trabajadora, Vallejo vía más bien un peculiar marxismo .

Juan Larrea, por su parte, quien elaborará su tesis de España salvada del fascismo en América Latina, precisamente gracias a Vallejo; convirtiendo al poeta andino: “en el heraldo espiritual de esta España extraviada, recuperada en el lenguaje poético vallejiano para los tiempos futuros”; sí soltará prenda a Ortega, confesándole a éste su predilección de la poesía del peruano respecto a la de Huidobro.

En fin, el último testigo con el que Julio Ortega va armando su mosaico vallejiano es Georgette. Espiritista, a decir del estudioso peruano: “convocaba a Vallejo que, según ella, concurría a su llamado”. Mas, acaso lo más pertinente, según este mismo crítico es que: “Era muy laborioso esclarecer los enigmas vallejianos con ella porque su lectura de la obra pasaba por sus propias convicciones. Ella había asumido que el poeta era ortodoxamente marxista, y todo lo interpretaba en esa clave”.
Por último, aunque así, lúcidamente comienza esta nota orteguiana, nos plegamos a estas palabras a modo de síntesis: “Muchos han leído su poesía como si fuese su biografía y, me temo, el Vallejo que creen conocer es una invención sentimental [él mismo ya había dicho: “Me han confundido con mi llanto”], forjada por la figura del poeta marginal, bohemio, pobre y sin oficio; figura, además, derivada del paradigma romántico del rebelde que se enfrenta a la sociedad y documenta su sacrificio”.

CÉSAR VALLEJO O LA ESCRITURA DE COMBATE. MADRID, 1931/ José Luis Corazón Ardura




Estimado señor,
me dirijo a usted con el único motivo de hacerle llegar un breve texto con el cual participé en el premio de Telefónica, dedicado a la estancia madrileña del poeta. Soy un investigador español que se encuentra a la mitad de un ensayo literario acerca de la escritura vallejiana, con vistas a obtener un doctorado en teoría literaria, si eso puede decirse, durante este año.
Le agradezco su disposición y todas las informaciones actuales que va desgranando en su blog, las cuales son de gran importancia para aquellos que seguimos estudiando su obra desde España que, dicho sea de paso, no ha dedicado demasiados estudios a la obra de Vallejo en los últimos tiempos.
Atentamente,


José Luis Corazón Ardura (Madrid, 1973). Doctor en Filosofía por la Universidad Autónoma de Madrid (2005) Jefe de redacción de la revista Sublime arte + cultura contemporánea (sublimeart.net). Es Profesor de Filosofía de Educación Secundaria. Ha colaborado en diversas publicaciones como Microfisuras, Contrastes o La alegría de los naufragios. Ha formado parte del IV Foro Internacional de expertos en arte contemporáneo (ARCO’ 06) Escritor y comisario de exposiciones.

PDF:
http://blog.pucp.edu.pe/media/793/20120130-cesar_vallejo_o_la_escritura_de_combate_premio_vallejo_madrid_1931_jose_luis_corazon_ardura.pdf